Vivir es un asunto urgente.

Las urgencias no me gustan, quizá sea mas propio o para mi lo es, decir que vivir, es respirar con conciencia, cada inspiración, de cada segundo del día.

Cuando escucho  la frase del título,  me da la sensación de estar viendo un film de la época en que soldados y familiares de la segunda guerra mundial, intentaban vivir en unos segundos y en pocos días, la trayectoria que se hace a través de una media de tiempo de treinta años, hablando de la época adulta. 

Hubo otras guerras y otros tiempos, pero quizá no han sido tan merecedoras para los cineastas del siglo pasado, como esta guerra en que todo se justificaba por la inmediatez  (o la sensación de ella) que de la muerte se tenía.

Para mí, si tienen la paciencia de escucharme-leerme, vivir es levantarse cada día sabiendo quien soy y quien quiero ser. Sabiendo lo que es posible hoy y disfrutando de ello. Siendo consciente de lo bueno que tengo y de lo mejorable de las situaciones que me frustran. 

No creo mas allá de lo mínimo, previsible y necesario para vivir aquí y ahora, que debamos programar un mañana. ¿Que mañana?

El único mañana es hoy y debemos ser felices para saber que si mañana no llega, hemos sido felices hoy, hemos honrado la vida y vivido hoy, amando lo que tenemos. 

Si hemos amado, desde el trabajo inevitable para mantenerse en estas épocas, hasta el amigo diferente que mas de una ves nos enoja, desde un vecino cascarrabias, hasta un  hijo prodigo de esos que nunca faltan, podremos decir que hemos vivido.

Tenéis razón, vivir es un asunto urgente, aunque cada quien puede interpretar la urgencia de maneras distintas. 

En particular tengo urgencias varias: desde aprender lo que no he aprendido cuando correspondía a vivir experiencias varias antes de que sea demasiado tarde y porque no también, despojarme de prejuicios acumulados durante años.

Siento urgencia de vivir pero , VIVIR,  con mayúsculas. Podría decir que siento urgencia por dejar reposar mi mente y así ser mas espontánea, enfrentar mis fantasmas, elaborar mis sentimientos, expresarlos sin mesura. 

Regalárselos al viento del otoño, para que los derrame allí donde hagan falta, donde haya un ser solo o triste, donde sirvan para pintar de colores el presente de alguien.

Vivir es un asunto urgente, pero mas urgente es saber que queremos y esperamos cada día y decidirnos a dar los pasos necesarios para conseguirlo. 

Cuando mañana? no, mañana no, hagámoslo hoy.

Alicia