Como seguir viviendo

La mayoría de las personas, se han hecho esta pregunta en algún momento de sus vidas, algunas tras haber  sufrido un abandono, otras una enfermedad, algunas la ruina económica, cada quien se ha hecho esta pregunta encontrando o no, respuesta según el caso.

Yo, en particular solo me la he hecho frente a la pérdida de los seres queridos.

Recuerdo que cuando murió mi padre solo tenía 21 años u y estaba esperando el nacimiento de mi primera hija, la respuesta se dio por si misma, una nueva vida y mi madre, que quedaba sola, no eran pocas razones para vivir.

En realidad siempre tuve más afinidad con mi padre, pero al ser ella quien quedó sola y muy necesitada de abrigo afectivo, me volqué a ella incondicionalmente, siendo esta ocupación más que suficiente, como aliciente para seguir adelante.  
Siendo sinceros, no le sirvió de mucho, ya que nunca lo pudo superar, y seis años después a pesar de su juventud, ella también se fue.

Recuerdo que al día siguiente de su partida, nos fuimos de viaje y por supuesto el tema era  ….y ahora que, cuando Gustavo amablemente me recordó que a mas de ellos, él y mi hija, tenia siete sobrinos que agradecerían enormemente que les prestara un poco de atención. Y así fue, durante muchos años mis sobrinos fueron, a más de mi pequeña familia, mi centro de atención.

Cuando se murió Gustavo, realmente, poco y nada me quedaba, mis hijos ya grandes y tan autónomos como fueron educados y por suerte asimilado, no me servían demasiado, y no enseguida pero con el tiempo, sabiendo que no me quedaba ya mucho por hacer por nadie, decidí vivir para mí.

Como supondréis eso es todo un aprendizaje para alguien, que vaya a saber porque razones de la vida, siempre necesito mirar un poco más allá de su ombligo.

Pero no sufráis, hoy les digo que debería haberlo hecho mucho antes, hoy por primera vez para mí, lo más importante y muy sanamente, soy yo.

Alicia