Carta de amor a un banquero

CARTA DE AMOR A UN BANQUERO

                                                           

Cuando lo conocí no sabia a que se dedicaba, era una persona agradable y correcta, aunque se vislumbraba un dejo de sarcasmo en sus frases. 

Luego como sucede muchas veces, me lié en una relacion en la que podría decir que todo venía muy bien hasta que descubrí con horror, mas por sus acciones, que por sus palabras, cual era su profesión: banquero. 

Inmediatamente decidí distanciarme ya que era inconcebible que yo pudiera compartir, aunque fuera una parte de mi vida con alguien de tan indecorosa profesión. No era compatible con mi ideario .....aunque también había algunas cosas que no podía  verbalizar y decidí escribirle unacarta que transcribo aquí:

Querido mío:

(eso sí, posesión aún en la despedida)

Tus actos me han hecho notar que perteneces auna especie que he extinguido hace tiempo demi vida. Empecé a notarlo cuando tu libido se expresaba al compás de la bolsa de valores tan fluctuante, tendiendo a la baja en los últimos tiempos. 

Aún así me negaba a mi misma tan poco acierto en mi elección y lo justificaba con las preocupaciones diarias. 

Pero era in-disimulable el malestar. Las acciones cotizaban a la baja cada vez más, corriendo el riesgo de arrastrar también las mías, que su buen trabajo me costaba mantenerlas en alza. 

Por un tiempo decidí poner nuestro romance aplazo fijo, me habían asegurado que los incentivos podían hacer que todo volviera a los primeros días de románticos paseos a la luz dela luna, pero el euroibor caía cada vez mas, arrastrándote en su devenir al igual que en el caso de las acciones.

Llegue a consultar a un experto que me sugirió probar con un fideicomiso, aunque me aseguro que los resultados serian muy lentos....... Demasiado para mis pretensiones.

Desde que descubrí a que te dedicabas, día adía miraba las cotizaciones cuando algo fallaba, y cada vez me convencía más que funcionábamos en ámbitos muy distintos. Es por eso que prefiero dejar esta relación para no deteriorarnos y conservar  los ahorros deépocas  en que  la construcción te teníaentretenido dando hipotecas que sabias que nunca cobrarías, pero que eran un desafío en si mismas. 

Hoy ya todo perdido en las llanuras del capital, te has quedado aburrido, cansino y yo diría que........hasta perdido, por lo que no quiero compartir contigo los desalojos, tampoco cuando quizá se descubran tus manejos no muy decentes y te lleven al banquillo,  te pido que no me juzgues, lo que menos he podido soportar fueron los altibajos de la bolsa, aquellos mismos por los que descubrí tu profesión y por los que algunos días estabas en la cúspide y otros en depresión total. 

Con la distancia trataré de ponerme a salvo y conservarme para futuras batallas.

Lo siento, debería haberte conocido en el principio de la burbuja inmobiliaria, para poder disfrutar de todos tus encantos, pero no ha sido así, por lo que me despido de tí.

Tuya siempre (aunque solo en tu pensamiento) 

Alicia